miércoles, 18 de diciembre de 2013

El bebé abrigadito. Más labores de otoño.

Mi entrada de hoy sí es para abuelas. También para futuras mamás y para quien disfrute tejiendo pequeñas prendas para bebé.

Estas labores tan pequeñas son muy entretenidas, en el sentido de pasarlo bien tejiéndolas y en el de precisar mucho cuidado para rematarlas de forma bonita.

El próximo mes de enero voy a ser de nuevo abuela, de mi séptimo nieto, será un niño y sus papás han pensado para él un bonito nombre: Elías.

Para el coche de salir de paseo le he tejido una manta de lana de 80 x 80 cm. para abrigarle dentro del saco del cochecito. Si sale tan callejero como su hermana mayor, va a tener por delante varios meses de mucho frío.




He usado 200gr. de lana Katia/Tirol en color gris , agujas del 5,5 y empecé la labor con 140 p. Para hacer el dibujo he tejido punto bobo, punto jersey derecho y un calado simple. Por la calidad de la lana ha quedado ligera y esponjosa.

La ropita del niño la he hecho con unas madejas de lana muy fina, especiales para bebés. Compré una de cada color: gris, blanco, beige claro y marfil. He seguido los modelos de una revista, para las medidas de recién nacido o primera edad, y el resultado han sido tres chaquetitas y dos gorros.


(Punto jersey derecho y elástico 1/1. Se cierra por delante con 4 botones de nácar blancos)


(Punto bobo, remates en punto cangrejo en el cuello y cinco botones planos en la espalda. El gorro con adornos en gris le sirve también a la chaqueta de arriba) 

Para la presentación en sociedad del peque, he pensado este modelito más elegante en color marfil con adornos en beige claro. El gorro es igual que el blanco y gris. La chaqueta también se abrocha por delante con cuatro botones de nácar beige.




No es mi intención añadir un nuevo blog de labores pero tenéis que perdonar a una abuela ilusionada que quiere presumir un poco de sus "obras". También puedo aseguraros que son modelos exclusivos. Me inspiro en las revistas pero al final llevan mi sello personal.

Espero que el peque se sienta cómodo y calentito con la ropa que le he tejido poniendo todo mi amor en cada una de las vueltas. Según vaya creciendo le haré cositas nuevas.

Y, como yo digo: manos ocupadas cabecita despierta.
Abuela Ana