Ha sido una visita sorpresa, decidida sobre la marcha y la he hecho llevando de la mano a mi pequeña princesa , mi nieta menor, que aún le falta para cumplir dos años.
A Alejandra le encanta hacer turismo y los sitios un poco oscuros o cerrados con rejas los considera lugares para jugar al escondite con su papá y los llama "cu-cús". Es una turista intrépida a la que hay que sujetar para que no corra derecha hacia fosos y troneras.
En la actualidad el castillo de Escalona es un recinto en "rehabilitación" lenta y supongo que muy costosa.
Recuerdo que hace muchos años, cuando al abuelo Juan se le ocurrió pintar un cuadro con la vista del castillo desde el río Alberche, solía hablarme, mientras pintaba, de la historia de Escalona. En sus asignaturas de Historia Medieval y Moderna, este lugar aparecía de vez en cuando asociado a personajes importantes de la historia de Castilla, y a él le gustaba documentarse muy bien.
Vista general desde el rio (debajo del puente) |
Vamos, que paseando por el castillo de Escalona me he sentido viajando por el tunel del tiempo y he fantaseado un poco, llevando a mi princesita de la mano.
Cu-cú, ¿donde estoy? |
Os cuento:
Las noticias más antiguas nos llevan a un asentamiento romano, un "castrum", para la defensa del paso del río Alberche, que a su vez le sirve de foso natural.
El río le sirve de foso natural con un desnivel de más de 25 metros |
Durante la dominación musulmana, los moros respetan el asentamiento del castrum y su recinto amurallado y edifican una fortaleza, restaurando y ampliando la que había. La población musulmana se consolida en la zona y gana importancia como lugar estratégico durante el Califato de Córdoba, formando parte del triángulo para la defensa de Toledo, formado por los sitios de Alamín, Maqueda y Escalona.
A principios del siglo XI, en 1083, Escalona es conquistada por Alfonso VI como primer paso para la conquista de Toledo y durante años es lugar de batallas y escaramuzas contra los musulmanes del norte de Africa.
En 1118 el rey Alfonso VII le otorga fuero (que quiere decir que el lugar tiene derechos y normas jurídicas, otorgadas por el rey).
En 1130 se concede a los hermanos Diego y Domingo Alvarez el encargo de repoblar el lugar y se construye un recinto amurallado de más de un kilómetro y medio de longitud en las cercanías del castillo. Una vez reconquistado el lugar aumenta su importancia como enclave en la retaguardia de los castellanos y prospera económicamente.
Torres albarranas edificadas en la época del infante don Juan Manuel |
Fachada del palacio (en obras) |
El Condestable don Alvaro de Luna |
En 1470, el rey Enrique IV, el hermano de Isabel, lo dona a su favorito Juan Pacheco, marqués de Villena y desde ese momento duque de Escalona. A partir de entonces Escalona y la comarca son escenario de los enfrentamientos por conseguir la corona de Castilla entre los partidarios de Isabel y los de su hermano y su descendiente Juana (la Beltraneja).
A lo largo de cuatro siglos más, el castillo pertenece a los Villena, después al duque de Osuna y otra vez al marqués de Villena.
Durante la invasión francesa, a principios del siglo XIX, el palacio es desmantelado por las tropas napoleónicas, que utilizan las vigas del artesonado para construir un puente sobre el río Alberche que facilite el paso de tropas y material de guerra en la batalla de Talavera. Los restos del edificio son incendiados por orden del mariscal Soult.
Estado actual de la fortaleza que rodea el palacio. El censo de cigüeñas crece cada año. |
En 1922, para evitar un mayor deterioro de las ruínas de la fortaleza de Escalona, es declarado monumento nacional. Su propiedad pasa a manos privadas y se va rehabilitando, lentamente, hasta su estado actual.
En esta pradera hace unos años se celebraban corridas de toros durante las fiestas |
Gracias a la Mamá 2.0, por hacer unas fotos tan buenas y pasármelas para el blog.
Si alguien se anima, nos vemos en Escalona (Toledo)
Abuela Ana